¿Qué eres? ¿Víctima o verdugo? ¿En qué lugar estás? ¿Qué es lo que te mueve? ¿Tu razón? ¿Tus ideas? ¿Tu educación? ¿Tus intereses? ¿Lo que crees que eres, lo que dicen…?
No hay respuestas. No verdaderas. Hay un montón de disculpas y razones. Un saco de historias. Un océano de ideas. Un mundo lleno de miedo y dolor.
Suelta la historia y dime… quién eres?
Sólo un corazón que late, unos ojos que lloran, un cuerpo que huye, unas manos que se defienden…?
En medio de todo solo tú. Dejando que la vida te traspase.
No te equivoques. La película siempre es la misma pero nada de lo que ocurre ahí afuera tiene que ver contigo. Se trata de una «peli», de buenos y malos, de verdades y mentiras…
En el silencio, en tu corazón, está la respuesta, los valores, lo profundo, la verdad. Y hallarás el Amor… En la música. En la Naturaleza. En ti.
Déjate de historias, anda. Camina. En silencio y en paz. Responsable de tus pasos. Respirando el instante.
Tú contigo. Y el Amor.
Otro gallo nos cantara…
Sólo dejaremos de estar solos y de ser vulnerables cuando admitamos que estamos solos y somos vulnerables. El amor nos hará (creer que) podemos con todo. Al final, después de ir dejando trocitos de nosotros mismos por aquí y por allá, cuando todo aquello por lo que merece la pena vivir ya no esté, nos daremos cuenta de que tenemos que irnos, pero ya no nos importará mucho…
Sinceramente, me parece bestial tu propuesta a nivel filosófico. Ni qué decir de la forma en que te expresas. Muy original?
Gracias Davis. Es tu alma sensible la que me recibe!